Siempre las hice color polenta, hasta que se me ocurrió que podía reincorporar la remolacha (abandonada en casa por mi niño) y hacer las formitas mucho más divertidas y nutritivas.
Mi consejo es primero incorporarlas naturales, de color "polenta" y una vez que son aceptadas ahi empezar a variar.
Por cada color utilice…
- 1 vaso mediano de polenta de cocción rápida (1 minuto)
- 3 vasos de leche (entera o descremada, según lo que les guste y según para que edad cocinen: antes de los 2 años no se recomienda dar lácteos descremados a los niños)
- 100 gramos de queso rallado
- 35 gramos de manteca pomada
- 3 remolachas chicas al vapor y luego procesadas o 1 paquete de espinacas blanqueadas y luego procesadas (ambas las tengo ya preparadas en el freezer)
Pones a hervir la leche y cuando está a punto de hervir, agregas la remolacha o la espinaca y la manteca. Una vez que hierva agregas la polenta en forma de lluvia, y sin parar de revolver incorporas el queso rallado. Todo esto lleva el minuto de cocción de la polenta. Así caliente la vuelcas sobre una fuente rectangular (o la que tengas) con spray vegetal o un mínimo de aceite y la dejas enfriar.
Una vez fría utilizas los cortantes que más te gusten y las colocas en una fuente de horno para que se doren un poquito (no necesitan materia grasa porque ya tienen manteca, pero podes rociar con spray vegetal para que no se peguen. Ojo, que si las dejas mucho tiempo se quedan crocantes, que son riquísimas, pero riesgosas para los niños pequeños por el peligro de que se atraganten.
Buen provecho !!